"EL VENENO PERFECTO" - Amanda Quick

Atormentada por los rumores de que envenenó a su prometido, Lucinda Bromley vive alejada de la sociedad del Londres victoriano. De vez en cuando, sin embargo, se embarca en la investigación de un asesinato, pues Lucinda tiene una cualidad excepcional: es capaz de detectar casi cualquier tipo de veneno, sobre todo si es de origen vegetal. Ahora, la muerte de un noble la afecta muy directamente, ya que el veneno encontrado en la escena del crimen procede de una planta robada en su propio invernadero...

Para descubrir al asesino, Lucinda solicitará los servicios del investigador psíquico Caleb Jones. La atracción entre ambos será inmediata, pero pronto se verán en medio de una funesta conspiración cuyos orígenes se remontan a los primeros tiempos de la misteriosa Sociedad de los Arcanos.

Sociedades secretas, asociaciones ocultas, conspiraciones, venganzas, intrigas, asesinatos, investigaciones, peligros y amenazas.... Todo ello aderezado con situaciones paranormales y personajes con talentos psíquicos. Estos son los ingredientes con los que Amanda Quick construye una historia un tanto inusual.

Lucinda Bromley es una mujer segura de sí misma, inteligente y con un don especial. Hija de unos reputados botánicos, ella sigue la estela de sus progenitores. Sus conocimientos del mundo vegetal, así como su extraordinario invernadero, son de sobra conocidos por los demás. Pero también es famosa por ser sospechosa de haber asesinado a su prometido, lo que la aleja de la sociedad elegante. Sin embargo, su característica más asombrosa es que es capaz de detectar cualquier veneno y su composición sin ni siquiera tenerlo delante. Esta cualidad la lleva a colaborar con el Inspector Spellar. Una de sus investigaciones, la acerca al escenario del crimen de un aristócrata; la complicación surge cuando se da cuenta de que el veneno se ha fabricado a partir de una planta robada de su invernadero.

Con el fin de encontrar al ladrón de tan peligroso helecho, contrata los servicios del investigador psíquico Caleb Jones, descendiente directo del fundador de la Sociedad de los Arcanos; cuyos miembros poseen talentos psíquicos especiales de distinta índole. Aunque Caleb pertenece a una poderosa familia, vive alejado de la alta sociedad. Se trata de un hombre serio y casi taciturno. Centrado en sus investigaciones psíquicas y en el estudio de la Sociedad Arcana.

La colaboración entre Lucinda y Caleb, les llevará a descubrir otros asesinatos, todos ellos relacionados con sociedades ocultas, venenos y conspiraciones. También sufrirán las consecuencias de tales actividades y ellos mismos se verán envueltos en atentados contra su propia vida. Desde el primer encuentro ambos sienten una intensa atracción el uno por el otro, que derivará, como no podía ser de otra manera, en un profundo amor.

En mi opinión lo mejor de toda la novela son los diálogos entre Caleb y Lucinda. Son interesantes, inteligentes, ágiles y, por momentos divertidos. En ocasiones, incluso podríamos decir que son casi competiciones verbales entre dos contendientes de elevada capacidad intelectual. A pesar de tratarse de la época victoriana, percibes a ambos protagonistas como “iguales”, donde la mujer no es menospreciada por razón de género y sí valorada por sus muchas cualidades al margen de su aspecto físico.

¿Lo peor de todo el libro?. Considero que Amanda Quick utiliza en exceso el vocabulario paranormal. Todo son talentos psíquicos, facultades psíquicas, relaciones psíquicas, investigaciones psíquicas, asesinatos psíquicos, sociedades ocultas psíquicas, venenos psíquicos.... O es que yo soy poco dada a lo paranormal o es que llega un momento en que realmente cansa tanto “psiquismo”...

Por otro lado, es una novela recomendable para aquellos que gusten de los relatos paranormales, los asesinatos y las investigaciones; porque en este aspecto, la trama es interesante e inteligente.

No obstante, si lo que se busca es una historia de amor típica, entonces este no es el libro adecuado. En “El Veneno Perfecto”, el amor queda relegado a un segundo, o tercer, puesto. El romanticismo, los sentimientos y la sensualidad son prácticamente inexistentes en el argumento y están escasamente desarrollados.

Sólo me queda decir, y repetir, que con lo que realmente disfruté fue con los diálogos entre ambos protagonistas, arrancándome incluso alguna que otra carcajada. Sin duda, lo mejor de todo el libro.